martes, 22 de julio de 2008

Bajando la cuesta viene.

Bajando la cuesta viene
un corazón lastimado,
con las heridas que tiene
abiertas de lado a lado

Por el otro lado sube
ese corazón sanado,
ni se acuerda que lo tuve
entre mis manos sangrado.

El mío baja al infierno
de la burla y desespero,
a recibir su castigo
sin piedad y sin consuelo.

El tuyo que viaja al cielo
del placer y la quietud
regenerando su vida
adquiriendo juventud.

Por lo tanto mi suplicio
dispuesto voy a pagar,
no importa si en el intento
la vida pueda entregar.

Pedro Tapia.

No hay comentarios: